Escondido en el interior de este museo se encuentra este espléndido café-restaurante. Tiene tres zonas diferentes: terraza exterior, interior y patio acristalado. Nosotros entramos a tomar un café, y la verdad es que nos gustó mucho. Además, al ser domingo se podía tomar un bruch de bufé que tenía una pinta estupenda.

No hay comentarios:
Publicar un comentario